Algunos de los que nos acompañan nos muestran su extrañeza por el sitio elegido, un recorrido muy cercano al casco urbano, pero donde se puede disfrutar de unas perspectivas de Lorca diferentes y a la vez desconocidas.
Una alternativa que partiendo a pie desde el mismo centro de Lorca, nos da la oportunidad de descubrir rincones con un toque diferente y alternativo a la muy conocida ruta del CEJO.
Iniciamos la marcha bordeando el canal del trasvase, que pronto dejaremos e iniciamos la ascensión hasta las primeras lomas, donde se contempla la elegante vista de Lorca con su castillo aparentemente solitario pero con muchos ladrillos.
Iniciamos el descenso suave y cómodamente, que entre pinos nos lleva a cruzar la autovía y a encontrarnos con el MENHIR DE SERRATA, monumento megalítico del III milenio A.C.
Después de la foto de rigor nos dirigimos al área recreativa de el Oasis, es la hora del almuerzo, de pasar algunos minutos relajados, charlando y contemplando la naturaleza, ¡que mejor manera para descubrirla que diluyéndose en ella!
Se reanuda la marcha por la pista y vamos ganando altura, hasta dejar la pista y comenzar el descenso buscando el cauce de la rambla. Desde este punto se tiene una visión totalmente aérea, una de esas visiones con las que la montaña gratifica a quienes gustan de esforzarse y perderse en sus indómitos vericuetos.
Descendemos hasta el nacimiento de los antiguos baños de Carraclaca, paraje increíblemente extraño y sorprendente, un color rojizo, que mezclado con el gris del día lluvioso, nos brindó la oportunidad de disfrutar y descubrir unos parajes cercanos y una bonita manera de disfrutar con los amigos.
Así cansado y de vuelta a casa solo queda un pensamiento, ¡volver!
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